R.E.M. – Reveal: Un Cafecito y Un Chocolate
Autor: Iosi Grinboju
Si sos de leer críticas
de discos por ahí, vas a ver que en los medio de comunicación “standard”
hay bastante consenso en general al hacer críticas de discos. Es porque nadie
quiere quedarse afuera y opinar que tal disco es bueno si todos los demás
opinan que es malo. Y los mismos comentarios y etiquetas definitorias se repiten
sin cesar, hasta que finalmente uno ve que la gente termina creyéndolo y
escucha de su vecino “tal disco de U2 es el mejor de la década!” como si de
veras fuese una conclusión suya.
Con
el nuevo disco de esta banda tan especial y fina que es REM, lo que van a leer y
oír por ahí es que este disco, “Reveal”, es el mejor desde “Automatic
for the People” (aquel que tenía “Everybody Hurts”, y “Man on the
Moon”). Ustedes se imaginan que después de semejante preámbulo, el que firma
estas líneas no está de acuerdo con tales conceptos.
Si
bien es cierto que los discos “New Adventures in Hi-Fi” y “Up” no fueron
sucesos ni mucho menos, pareciera que todos se olvidaron del magnifico
“Monster” que salió allá por los comienzos de los 90.
En
fin. “Reveal” paga los gastos. De una primera oída ya nomás. No es un
disco difícil de entender, y no por eso es berreta. Tiene canciones delicadas
como “All the Way To Reno”, tiene canciones que emocionan como “I’ll
Take the Rain” y para todos aquellos que bailaron con “Losing my Religion”
tiene “Imitation of Life” que es el primer corte y tramposamente es la canción
menos representativa del disco. Pero no se pierdan el fantástico video: tratar
de adivinar como lo filmaron puede desencadenar en una crisis nerviosa con
pasaje gratis al Borda (N del R: conocido manicomio argentino).
Para
aquellos que gustan de escuchar las cositas de fondo, busquen el silbato a lo
Castrilli en “Saturn Return”, y ya lo pueden votar como mejor instrumentos
varios en la encuesta de “Pelo”. (N del R: todos conocen a Castrilli, no?).
El
postre es el mejor tema del disco, que empieza como uno más de los varios
pseudo-unplugged que tiene este disco, pero levanta como una ola: “She Just
Wants To Be”.
Como
“bottom line” les podría recomendar que elijan su taza favorita, se
preparen un buen café doble al estilo Twin Peaks, acompañen con un chocolate
relleno de dulce de leche, se sienten en el sillón del comedor y levanten las
patitas sobre la mesita ratona. Presionen play en el control remoto, y saboreen
una horita.