Raton M (08/07/2001) Argentina.
Amigos, anoche lleguè a casa con algo que me carcomìa por dentro, asì que luego de unos mates, un atado de cigarrilo y luego de abandonar algunos de mis mamarrachos escriturarios y de escuchar a Janes Chopin (creo que asì se escribe) y a Pinck Floy, busquè desesperadamente algo que habìa leido en no sè dònde. Luego de horas, habiendo comenzado a las 02 de la madruga, lo encontrè a las 06,30. Me roìa a mi mismo y a las varias frases, palabras que habìan quedado en mi bocho al leer en El astilleros a varios autores (el que habla del panorama de la literatura argentina con avisos de un diario; recordè a Galdeano (mi amigo) y a Màrmol por "Inocente", a Carmen Lopez y a Noelia. Aquì transcribirè lo que considero para Marmol, Lopez y Noelia y gran parte de lo que pienso o creo de Inocente y de su autor. No sè si podràn hacer alguna relaciòn con dicho texto, pero no importa (algun dìa lo haràn, cuando me lleven flores.)
Aquì, en este debate quiero copiar un texto de Borges, pues como yo a veces no me sè expresar, en cuanto encuentro alguien que piensa o cree lo mismo que yo pero que lo sabe expresar me tomo el atrevimiento de que hable por mì, Y paso al texto, para analizar y responder a nuestro debate. Entre amigos todo vale: insultos, flores y resacas de bronca.
Por Jorge Luis Borges
(que hoy ha venido de su tumba exclusivamente a la pàgina de Elastillero, me costò convencerlo, pero vino. Un poquito deformadito su fìsico, pero juro que yo no fui, no lo roì yo. Esta vez fueron los gusano). Raton M.
"Mi propòsito era hablar del credo del poeta, pero, al examinarme, me he dado cuenta de que yo sòlo tengo uçn credo vacilante. Este credo quizà me sea ùtil a mì, pero difìcilmente servirà para otros. (...) Alguna vez tengo el coraje y la esperanza suficientes para pensar que puede ser verdad (refirièndose a "Lo bello es gozo para siempre" de Keats), como una especie de fòrmula. Alguna vez tengo el coraje y la esperanza suficientes para pensar que puede ser verdad: que, aunque todos los hombres escriben en el tiempo, envueltos en circunstancias y accidentes y frutraciones temporales, es posible alcanzar; de algùn modo, un poco de belleza eterna. (...) No hay placer en contar unas historia como sucediò realemnte. Tenemos que cambiar alguna cosa, aunque nos parezca insignificante; si no es asì, no nos consideramos artistas sino, quizà, meros periodistas o historiadores. Aunque imagino que los verdaderos historiadores siempre han sabid! o que pueden ser tan imaginativos como los novelistas. (...) Cuando escribo algo, procuro no comprenderlo. No creo que la inteligencia tanga demasiada relaciòn con el trabajo del escritor. Pienso que uno de los pecados de la literatura moderna es que tiene demasiada conciencia de sì misma. (...) los autores franceses son, por lo general, demasiado concientess de sì mismos, antes, incluso, de saber lo que va a escribir. Dice: "¿Què escribirìa, por ejemplo, un catòlico nacido en tal o cual provincia, y socialista hasta cierto punto?" O: "Còmo deberìamos escribir despuès de la segunda guerra mundial?". Supongo que hay mucha gente que se agobia con estos problemas ilusorios.
Cuando escribo (... yo no sea un buen ejemplo, sino sòlo una terrible advertencia), intento olvidarlo todo sobre mì. me olvido de mis circunstancias personales. No intento como alguna vez lo intentè, ser un "escritor suramericano". sòlo intento transmitir el sueño. Y si el sueño es confuso (en mi caso, puede serlo), no intento embellecerlo, ni siquiera comprenderlo. (...)
Quizà piensen ustedes que han oìdo una buena conferencia. En ese caso debo darles las gracias, porque despuès de todo ustedes han trabajado conmigo. (...)
(...) el significado no es importante (referente a un soneto de Spinoza): lo que importa es cierta mùsica, cierta manera de cedir las cosas. Quizà incluso la mùsica falte, uestedes la sientan. O , mejor, puesto que sè que son tan amables, la inventen por mì."
Nota. Diario Nacion, 3 de junio, 2001. Credo de poeta. Conferencia realizada en U. de Harvard en 1967 y 1968 (ayer nomàs). Gentileza del copista: Raton.
.
Saludos ASTILLEROS (¡TRIPAAAAAAAAAAA!! o ¡¡MERDE'!!!!!! (mucha viejos)
Raton M (07/07/2001) - Argentina.
"HABLARÉ
NO POR BOCA DE GANZO, SINO COMO SI ESTUVIESE ENTRE
AMIGOS QUE ESCRIBIMOS Y QUE REALMENTE NOS IMPORTA LA
ESCRITURA DE CUALQUIERA."
Disculpen que me entrometa, quiero ACLARAR que no acostumbro a hacer ni críticas ni dar opiniones respecto a los escritos y sus estructuras y etc, etc. públicamente, además, no entiendo nada de todo eso. Suelo atenerme a decir me gusta o no la historia. Pero en el caso de "Inocente" si me permiten arriesgaré a comentar algo: leyendo el cuento "Inocente" a las apuradas (un error mío) me resultó un texto interesante por ese dejar ciertos temas o "personajes" como inconclusos o algo parecido. Y esto deja peloteando varias puntas sin permitir saber el resto ni la continuación del todo de esa punta que sólo asomó. No sé si me explico; hay una intriga, un no saberse del todo o un saber a medias que en realidad a uno al principio como lector le interesa, luego ya no. Pues uno se engancha o se hace cómplice de ese modo que tiene Alejandro Marmol; me parece una escritura qu! e nos llama a ya no redondear las cosas, a dejar en situaciones puras y o a presentarla sin explicaciones, nos llama al corte y a dejar aquellas situaciones donde se describían "porque tal cosa por X" o "para tal cosa", esa literatura YA NO VA (o ha muerto). Me parece que en Marmol A. lo que se deduce de su cuento y con la historia es justamente eso. Lo bizarro, lo minimalista, lo abstracto y otros movimientos, modos, estilos o como se llame me parece que en Inocente está todo UNIDO y demostrado. Y, aunque les parezca muy simple lo que diré, lo que más me ha gustado es el final: " Unos pasos adelante, frente a una vidriera colmada de televisores, una pareja lloraba desconsoladamente". Un final "como" descolgado del resto del relato, que creo confirma mi opinión o lo que quiesiera expresar de la obra de Marmol. Aunque a mí (en particular) lo que no me gusta es ese adver! bio "desconsoladamente", porque los "mentes" a veces hacen muy larga una oración o hacen perder fuerza. Pero en el caso de Marmol está bien el uso. Porque de haber puesto fuerza en ese adverbio se hubiese perdido mucho. O no. No sé. Además me parece que Marmol emplea frases largas y bueno, el cuento salió así o lo hizo así. El resto, es cuestión del gusto de cada lector.
Quizá mi opinion es muy simplista, pero me parece que hacer análisis de la literatura desde el psicoanálisis no lo veo, pues recostarse en una corriente psicoanalítica me resulta no crear nada nuevo. Perdón, pero ese tipo de análisis fue auge en los años 60 y lo siento TAN VIEJO.
PD: me revienta el facilismo con el que muchos toman el psicoanálisis como punto de apoyo ante la literatura. Así cualquiera puede hablar pavadas o delirar o analizar un texto sin ver aquello que hace o puede hacer realmente a la Literatura. Puaj, detesto esos personajes. Igual que aquellos que caen en la cuestión de género, puaj, puaj,,,, una palangana que me sangran las tripas.
04/07/2001 Veronica Spoturno
27/05/2001 Alejandro Marmol
HOla amigos, sucede que el 25 de mayo en la
argentina es un feriado, y aprovechando el fin de semana largo viaje a Necochea
(mi ciudad natal) a visitar a la familia.
Hoy leo medio a las apuradas todos los mensajes ya que debo partir a trabajar,
pero antes de irme quiero decir que coincido (respecto a los comentarios sobre
Inocente) con Pedro casi en la totalidad de lo que dice,
tambien con Noelia, y lamentablemente, para no variar, sigo en desacuerdo
con Carmen y le aviso que jamas, bajo ningun circunstancia, accederé a explicar
un cuento (la literatura no es un juego de preguntas y respuestas donde el
escritor plantea un enigma y gana el que coincide con el)
Perdon Carmen, pero no puedo mas que estar en desacuerdo con vos. A la noche
prometo escribir un poco mas.
Un Abrazo.. Alejandro
25/05/2001 Carmen Lopez
Al hilo de la pregunta que deja en suspenso
Pedro: a mi entender los sueños como tal creación de la mente humana son
inocentes, tan inocentes como un cuadro, una melodía, un poema...Pueden ser
hermosos o terribles, complejos o simples, elaborados y llenos de metáforas o
diáfanos y cuajados de imágenes cotidianas, pero en sí mismos, inocentes.
El que sueña es inocente en cuanto a la falta de "voluntariedad" de
lo que en el sueño acontece, escapa a su control puesto que es el
inconsciente el "hacedor" de sueños. Considerando que solo es
culpable el que libre y a conciencia hace un daño, el soñador es inocente del
daño que se hace en su sueño.
Pero si creemos el plantemiento de que el sueño es expresión de deseos
reprimidos, cabria plantear que el indivíduo es "culpable" de ese
deseo, aunque si es capaz de reprimirlo para no dañar en lo real y sólo se le
escapa en lo onírico, es igual que el que traslada su hostilidad a unas notas musicales desgarradas, o convierte su
agresividad en un lienzo atormentado o su odio en un poema angustioso.
Ojalá siempre el odio, la agresividad, el resentimiento, sólo existieran en el
mundo de los sueños o del arte y no en el mundo real.
Saludos
25 / 05/2001 MENSAJE REMITIDO POR NOELIA
Me parece, sin ofender a nadie, que hasta
ahora, cada lector que ha aportado sus opiniones acerca de los textos que va
leyendo en la página, lo hace en base a una operación minuciosa de rastrear en
cada párrafo un sentido absoluto y total... algo así como un correlato casi idéntico
con la realidad o con las teorías que aportaron los grandes autores del siglo
XX.
Más allá de eso, creo que leer un texto no pasa por este lado. Si no más bien
por el placer de la lectura y porque a través de este placer, consigue su
objetivo (cualquiera sea que fuera: por ejemplo decir que Abril siente culpa por
la muerte del padre). Pero si, en cada lectura, nos esforzamos por leer entre líneas
cosas que quizá no quieran decirse, el texto pierde todo su encanto. La lectura
debería ser fluída desde el principio al final, sin tropiezos, dejándonos
llevar por cada letra y cada palabra, debería ser atenta y comprensiva, debería
ser fructífera y fruitiva y una vez que lleguemos al final, deberíamos
habernos movilizado de tal manera que ese mensaje que se quiera transmitir sea
natural y espontáneo.
Esta es mi opinión, porque me pasó que después de leer las críticas a
Inocente, leí el texto de una forma muy distinta, casi tratanto de encontrar
esos significados ocultos... y me olvidé que a lo mejor el autor no quiso decir
nada de eso, es más, no quiera haber dicho nada de nada. Son posibilidades,
pero posibilidades al fin.
Saludos rosarinos, Noelia.
25/ 05/2001 Pedro Martinez
En torno a la
tertulia sobre Inocente; me gustaría aportar algunas opiniones:
Creo que el hecho de no decir que pasó concretamente con el padre de Abril,
hace que el cuento gane en interés y que no es necesario explicar los
pormenores de la muerte del mismo. Si Alejandro hubiera explicado el cómo de
ésta, los sueños de Abril perderían interés y el cuento se resentiría
notablemente.
En algunos momentos, incluso, he creído percibir alguna relación entre estos
sueños y la desaparición de la especie de las ballenas ¿se podría pensar
en una correlación entre ambas muertes? No sé si Alejandro quería hacer
este paralelismo.
Otra cosa: el sentimiento de culpa de Abril alrededor de la muerte del padre
adquiere fuerza y misterio precisamente por que no se conoce cómo sucedió la
muerte del padre.
El cojo, por otro lado, es un personaje comparsa, me atrevería a decir, un
elemento más del mobiliario de la escena central del relato; un cuadro de
calidad que decora la trama.
El final, desesperanzado como no podía ser menos, redondea la trama simbólica
del relato y acentúa la reflexión sobre los contornos de la realidad; Abril
sólo puede adquirir conciencia de la objetividad; a través de algo también
ilusorio, de la presencia de la Luna que para ella, es casi irreal, fantástica....
Un par de preguntas: ¿los sueños son inocentes?... ¿O sólo son inocentes
los que los sueñan?
Una palabra que no me cuadra: ¿se puede definir como escatológica una
persecución? Y lo digo porque la escatología es una ciencia que estudia las
creencias sobre la meta definitiva del curso histórico de la humanidad en
general y de sus individuos concretos; (copio de la enciclopedia) aunque, no sé
por qué, es una palabra que se utiliza también con todo lo que tiene que ver
con la mierda. Si Alejandro quería explicitar lo primero con relación a la
huida a través del lago Titicaca, me temo que el cultismo chirría con quién
lo pronuncia; en el segundo caso, pues bueno, con haber dicho una mierda, por
ejemplo, habría quedado mejor, en mi opinión. Quedan, por supuesto, otras
acepciones para esta palabra que me resulten desconocidas.
Saludos afectuosos para todos/as,
24/05/2001 Carmen Lopez
Alguien ha preguntado: ¿qué le paso a
Abril con su padre?. Quizás Alejandro deja abierta esta sugerencia a los
lectores.
A mi entender Abril pone a su padre en el límite entre la vida y la
muerte, un límite que se expresa en acantilados y abismos. Tanto uno como otro
me sugieren que ella piensa que su padre se ha hundido con ella en cierto abismo
húmedo, suave y acariciador como el agua en la que nada Abril.
El pianista, como alter-ego bueno del padre, trata de tranquilizarla y
recordarle, que al igual que la historia del cojo y el jorobado, trasladada a la
ficción, esto la exculpa.
Y ahora te toca contestar a tí, Alejandro. ¿Realmente Abril mató a su padre?.
Un saludo
23/05/2001
Alejandro Mármol
Claro que si Carmen, claro que si. Un texto tiene tantos lecturas como lectores e incluso mas, porque un mismo lector cambia sus lecturas con el tiempo.
Estoy de acuerdo con eso, y con que ese es el condimento de la Literatura. Es mas, quizas el ultimo objetivo de la pagina de internet, de mostrar un cuento, es sorprenderse de la lecturas tan distintas que aparecen.
Pero tambien es mi derecho estar en desacuerdo con vos, e incluso exigirte mas. Por que no?
Repito, si tu opinion es decir que Abril tiene culpa por desear la muerte del padre, para mi es lo mismo que me hubieras dicho: tu cuento esta lleno de palabras, y una oracion sucede a la otra, y hay verbos, adjetivos y sustantivos. No se si se comprende lo que quiero decir. Me encantan las criticas, buenas o malas, pero criticas.
A vos te gustaria que yo te respondiera diciendo "Carmen, me enviaste un mail"
Espero que se entienda a donde quiero llegar, y obviamente agradezco que me dispensen tanto tiempo.
Desde Buenos Aires, Argentina, Culo del mundo. Alejandro.
23 / 05 / 2001 Carmen Lopez
Cada texto,
Alejandro, tiene muchas lecturas, tantas como lectores, y eso es lo
maravilloso de la Literatura. No soy quien para hacer crítica literaria,
escribí lo que me sugería el personaje de Abril. Tu mismo dices que es una
historia inconclusa, esbozada, por eso mismo puede interpretarse de mil
formas, lo que no le quita valor al relato, más bien, lo enriquece.
Los sueños de Abril, con todos sus símbolos surrealistas, a mi me hacen
pensar en la culpa reprimida del deseo de matar al padre al mismo tiempo que
se siente amor por él. En teoría psicoanálitica (Freud), eso es universal.
(Se puede discutir esta teoría, por supuesto y se ha hecho desde muchos ángulos).
La creación de un ambiente decadente, me parece un hallazgo muy acorde con el
contenido que yo encontré en el cuento.
Espero que, una vez roto el fuego, alguien más aporte su punto de vista. Un
saludo
22/05/2001 Alejandro Mármol
Respecto al comentario de
Carmen acerca de mi cuento Inocente, debo reconocer que la critica me pareció
muy muy desacertada. Aclaro, para que no se malentienda, que me parece fantástico
que a alguien no le guste el cuento, que lo considere aburrido, o mal escrito, o
intrascendente. Seguramente el cuento no es demasiado bueno y tiene muchas cosas
que se pueden mejorar, pero el tratamiento psicológico fue muy despectivo.
De por si me parece ridículo limitar una critica a "complejo de matar al padre","complejo del contrahecho", complejo... complejo. Me parece ridículo porque es obvio que el cuento basa su línea argumental justamente en la culpa de Abril, es evidente. Pero el cuento pretende llegar un poco mas allá. Quizás no lo haya logrado y esa sería una buena critica, pero mi idea era contar una historia, una historia dispersa, una historia inconclusa, una historia delineada a pinceladas, una historia que abarque mucho y no termine en nada, ambigua y sugerente. Estoy seguro que todas mis pretensiones no se cumplen, pero me parece denigrante que se haya leído solo "complejo de matar al padre".
La Amiga Carmen desliza al final de su comentario: "Como texto literario valoraría la atmósfera de decadencia creada, muy acorde con el contenido del relato." No termino o no deseo entender del todo la oración y quizás me gustaría que fuera un poco más clara.
Admito que si solo logré con mi cuento que se destacara un triste complejo psicológico, fracasé. Tendré para no rendirme ante mi ego (porque no reconocerlo) la secreta duda de saber si fracase yo como escritor o Carmen como lectora, y quizás eso me ayude a superar otros complejos.
21/05/2001 Carmen Lopez
A mi entender
"Inocente" se podría leer en clave psicoanalítica como la eterna
culpa de desear la muerte del padre, ese deseo del que todos somos
culpables, por lo que es trasladada a la esfera del sueño para poder creer el
estribillo "...eres inocente cuando sueñas..."
El pianista es el trasunto de la figura paterna que exculpa a la postre,
porque el deseo de
matar al padre es eterno y se cumplirá generación tras generación, ya que
es necesario para madurar, el lo sabe.
El cojo necesita encontrar en su genealogía de contrahechos un héroe de
leyenda para sentirse menos
desgraciado. De nuevo es una historia de "familia".
Y el fin de las ballenas marcaría, a mi entender, el final de un modelo de
sociedad, como si la ballena representara a toda una especie de seres
en extinción.
Como texto literario valoraría la atmósfera de decadencia creada, muy acorde
con el contenido del relato.
Bueno, pues a ver si alguien más se anima a continuar esta charla, ¿vale?